miércoles, 28 de marzo de 2012

JUICIO ESTÉTICO

FRIEDRICH NIETZSCHE



Friedrich Nietzsche fue un apasionado defensor de la individualidad. Ello lo diferencia de Marx, quien criticaba a la sociedad moderna pero desde una visión colectivista. Su método genealógico, y su psicología del resentimiento y la sospecha, hicieron de él un precursor de los psicoanalistas del siglo XX.

Fue Nietzsche quien hizo de la metáfora "muerte de Dios" uno de los ejes en torno a los que gira su filosofía. Dos pasajes de su obra destacan sobre ese fondo temático constante. En el prólogo de Así habló Zaratustra, Nietzsche describe a Zaratustra llegando a los bosques donde encuentra a un anciano eremita que había abandonado su santa choza para buscar raíces en el bosque. ¿Y qué hace el santo en el bosque?, preguntó Zaratustra.



PENSAMIENTO:

En el pensamiento de Nietzsche suelen distinguirse tres grandes períodos:

El primero, que abarca desde sus estudios en Leipzig hasta 1877, está representado básicamente por su obra El nacimiento de la tragedia desde el espíritu de la música, publicada en 1871. En ella Nietzsche establece la distinción entre el espíritu apolíneo, que expresa el mundo como representación (artes plásticas) y el espíritu dionisíaco, que lo expresa como voluntad (música). Nietzsche exalta lo dionisíaco, que interpreta como encarnación de la voluntad de vivir, frente a lo apolíneo, que representa la huida ante la vida. El ideal estético del espíritu dionisíaco es el drama wagneriano, que pone en escena la fuerza incontenible de la vida.

Precisamente la ruptura de Nietzsche con Wagner es el hito que marca el tránsito del primer período al segundo, que va desde 1878 hasta 1882. Nietzsche reprocha a Wagner el haber cedido, en su obra Parsifal, ante los ideales del cristianismo, intrínsecamente contrarios a las fuerzas de la vida. En este segundo período, Nietzsche se aparta de los ideales y maestros que había admirado hasta entonces, se muestra crítico hacia el arte y la metafísica y se vuelve hacia el positivismo naturalista de la Ilustración, aunque sin caer en el culto al progreso. La obra central de este período es Humano, demasiado humano. Un libro para espíritus libres (1878-1880), dedicado a Voltaire.

El tercer período del pensamiento de Nietzsche arranca el año 1882 con la publicación de su obra Así habló Zaratustra. Las doctrinas de este período parten de la concepción de la vida como dolor, lucha e irracionalidad que había aprendido en Schopenhauer, pero rechazando la actitud de resignación ante ello. Nietzsche tenía la intención de presentar estas ideas en una obra sistemática que debía titularse La voluntad de poder, pero no pudo terminarla. Fue publicada después de su muerte con las anotaciones que se encontraron entre sus papeles póstumos.




Son cuatro los conceptos identificados como aportes importantes en cuanto a la filosofía de Nietzsche.

La voluntad de poder.
El eterno retorno.
El súper hombre.
Y su tan controversial "dios ha muerto".
Nietzsche sostenía que las creencias en Dios, la Moral y la Metafísica se han revelado inconsistentes; que su origen no se encuentra sino en el hombre, en el hombre débil y sufriente que no puede superar por sí mismo su dolor y busca consuelo en el más allá. Por eso habla de la "muerte de Dios" y propone un nuevo tipo de hombre: el súper-hombre. Paralelamente, advierte sobre el peligro de que nuestro tiempo dé a luz al más bajo de los hombres, al "último hombre", que no vive ya la grandeza alienada del hombre clásico pero tampoco llega a la propia del súper-hombre. El "último hombre" es aquel que se conforma con lo superficial, que no se conmueve ni por la "muerte de Dios". A este tipo de hombre Nietzsche lo considera despreciable. En cambio, en varios pasajes muestra admiración por los santos y los miembros del alto clero de la Iglesia Católica, no por su fe sino por su auto exigencia. Nietzsche fue, indudablemente, una persona de espíritu aristocrático.



OBRAS:

Aurora (1881).
La gaya ciencia (1882).
Más allá del bien y del mal (1886).
Genealogía de la moral (1887).
Crepúsculo de los ídolos (1888).

El programa de la Historia de la Filosofía de COU de Madrid propone dos textos de Nietzsche para lectura y comentario.

El primero de ellos pertenece a la obra Crepúsculo de los ídolos, publicada en 1888, en la que Nietzsche acentúa su crítica hacia los valores de la tradición cultural y filosófica del mundo occidental. En el texto, titulado ãLa razón en filosofía, Nietzsche expresa su idea de que la filosofía, abandonada a la razón como único instrumento para la comprensión del mundo y de la vida, se convierte en algo frío y vacío, una simple construcción metafísica, lógica y moral del mundo, contraria a los valores dionisíacos y trágicos de la vida.

El segundo texto, Sobre verdad y mentira en sentido extramoral, fue escrito por Nietzsche en 1873, pero no fue publicado hasta después de la muerte de su autor. Pertenece, pues, al primer período de su pensamiento, por lo que no es extraño encontrar en él la ya mencionada oposición entre lo racional y lo vital, entre el espíritu apolíneo y el espíritu dionisíaco.


HISTORIA:
Friedrich Wilhelm Nietzsche nació en Röcken, cerca de Lützen en 1844, hijo de un pastor evangélico, que murió cinco años más tarde, lo que hizo que Nietzsche creciera en un ambiente completamente femenino, dominado por el pietismo protestante.

Nietzsche estudió primero en el internado de la Escuela de Pforta, donde recibió los primeros conocimientos sobre la antigüedad clásica, que se convertiría en un referente básico de su pensamiento posterior.

Más tarde estudió filología clásica en las universidades de Bonn y Leipzig. En esta última ciudad entró en contacto con la filosofía de Schopenhauer, que también influiría decisivamente en la formación de sus ideas, y con la música de Wagner, a quien más tarde conoció personalmente, y del que fue un apasionado admirador.

En 1869, cuando apenas tenía 25 años, Nietzsche fue nombrado catedrático de filología clásica en la universidad de Basilea. A este nombramiento contribuyeron los trabajos filológicos que el joven Nietzsche había publicado antes de terminar sus estudios.

Su actividad docente en Basilea se vio interrumpida por la guerra de 1870, en la que Nietzsche participó como enfermero hasta que se vio obligado a regresar por causa de una disentería, enfermedad de la nunca llegó a restablecerse del todo. Así, en 1876 Nietzsche tuvo que pedir un permiso de un año por enfermedad, y poco después, su jubilación; la ciudad de Basilea le pagó una pensión durante el resto de su vida, hasta que murió en el año 1900.

En 1881 Nietzsche conoció a Lou Salomé, de la que se enamoró profundamente; pero esta mujer no le correspondió, sino que se casó con un amigo suyo.
Nietzsche vivió los últimos doce años de su vida en un estado de aletargamiento, bajo los cuidados de su madre y luego de su hermana, hasta que murió en el año 1900.


2. ¿Qué es?

JUICIO MORAL:

 Se llama juicio moral a aquel acto mental que afirma o niega el valor moral ante una situación determinada o un comportamiento del que somos testigos, es decir, el juicio moral que se da como resultado se pronunciará específicamente sobre la presencia o ausencia de ética en un hecho o actitud.
Los juicios morales son posibles gracias al sentido moral que cada ser humano posee. Este sentido moral es el resultado de los esquemas, normas y reglas que hemos ido adquiriendo y aprendiendo a lo largo de nuestra vida.


JUICIO ÉTICO:

El juicio ético nos permite determinar en qué grado los actos se apegan o alejan de las normas o principios establecidos por un sistema moral. Es ético porque se basa en aquellos criterios que justifican la forma de obrar. Por lo general, los sistemas morales de las sociedades toman como principio aquello que se reconoce como bueno, por ende, se actúa correctamente cuando los actos generan un bien.

JUICIO ESTÉTICO:

 El juicio de gusto estético tiene lugar cuando la representación es referida, no mediante el entendimiento al objeto para el conocimiento, sino mediante la imaginación al sujeto individual y al sentimiento de placer o de dolor generado por dicha representación. Así, el juicio de gusto no es un juicio lógico o de conocimiento, ya que la base de este último es objetiva, mientras que el fundamento del juicio estético sería subjetivo (según Kant, no puede ser más que subjetivo). Toda relación de las representaciones es objetiva, pero no cuando se relacionan con el juicio de placer en el cual el sujeto percibe de qué modo es afectado por la representación. El sujeto es consciente de la representación y de la sensación correspondiente que ésta genera, “considerar con la facultad de conocer un edificio regular, conforme a un fin, es algo completamente distinto de tener la conciencia de esa representación unida a la sensación de satisfacción” (Kant, 1977: 58). Es más, el sujeto cobra consciencia de la representación por el sentimiento de placer o dolor que la misma genera.


3. Barra, autores, imágenes, aportes:

Kant
Nietzche
Hegy
Sheiling



   


 
KANT




NIETZCHE



 

HEGY


SHEILING





KANT
La crítica del juicio es una obra fundamental en la historia del arte, ya que en ésta Kant desarrolla las dos categorías que marcan una gran división. La categoría de lo bello predomina en el paradigma clásico; la representación como forma determinada rige en la composición de la obra.

La categoría de lo sublime quiebra con el límite impuesto por la forma, dejando que fluyan los sentimientos más profundos del ser humano. Kandinsky es el primero en sobrepasar la forma para adentrarse en la abstracción como un medio más puro de expresión, y plasmar en el soporte material el “elemento interior”.

Su obra se aleja de la categoría de belleza subsumida a una representación prototípica y se asienta en la sublimidad.

La teoría estética de Kant es una de las teorías fundacionales de la estética en la filosofía moderna y lo es no por ser pionera, sino por ser una síntesis magistral del debate estético del siglo XVIII.

Kant no denominó estética su teoría, sino Critica del gusto, mucho más acorde con sus intenciones.

En la Crítica del juicio, publicada en 1790, Kant analiza los juicios referentes al gusto, es decir, los que afectan a lo bello y a lo sublime de la naturaleza o del arte.
Fundamenta la estética como algo sobrenatural, fuera del conocimiento y la misma moral, como algo especial.

Propuso dentro de una experiencia estética, una suposición, que cuando como sujetos tenemos una posición estética propia, el objeto no tiene naturalmente una base de concepto si no que está relacionada íntimamente con el sentimiento del sujeto.

Kant argumenta que los juicios estéticos (o ‘juicios del gusto’) deben tener cuatro características distintivas: Deben ser desinteresados, esto es, que algo nos da placer porque lo juzgamos bello, no que lo juzguemos bello porque es placentero.

Esos juicios deben ser tanto universales como necesarios. Esto significa a grandes rasgos que una parte intrínseca de la actividad de este juicio es esperar que los otros estén de acuerdo con nosotros.
 
NIETZCHE


Nietzsche comprendió bien los límites de la estética kantiana, que es, simplemente, pasiva y reflexiva. Nietzsche se propuso sustituir esta estética del espectador por una estética del creador.

Pues lo que el hombre artista nos enseña -él, que es tan distinto del hombre de conocimiento- es que el arte es «la tarea suprema y la verdadera actividad metafísica de esta vida».

Pero en este caso, para juzgar el sentido y el valor del acto creativo, se impone una vuelta a la oposición griega entre arte apolíneo y arte dionisíaco.

Apolo y Dionisos son, desde distintos ángulos, las más altas representaciones del arte. Pero, a la vez, son opuestos, antitéticos: Apolo significa la belleza de la medida; y Dionisos, el espanto sublime de la desmesura.

Por ejemplo, es apolínea la belleza de los templos que nace del orden y de la armonía de las líneas. Mientras que Dionisos es más inestable y tumultuoso.

Surge en la tragedia griega, que es la culminación del arte dionisíaco.

Pero, según Nietzsche, en un momento determinado de la historia, el conflicto equilibrado entre Dionisos y Apolo se desnivela, de tal forma que en la actualidad, por ejemplo, la belleza apolínea tiene una enorme presencia en nuestra cultura.

Desde Sócrates, el cual se presenta a sí mismo, en el Fedón, como consagrado a Apolo, el equilibrio se rompe en favor de este último dios, arrastrando insensiblemente a la humanidad hacia una especie de letargo de la voluntad. Toda la filosofía de Nietzsche es la del enigma de Dionisos, en la medida en que a través de este dios los griegos reflexionaron sobre el sentido más profundo de la vida.
HEGY



La Estética de Hegel, también posterior a Kant, constituye una obra maestra sobre este asunto.

Hegel hace una grandiosa síntesis histórica en la cual señala tres grandes etapas. El arte simbólico es la época del arte oriental: «La idea corrompe y falsea las formas del mundo real, que ella capta en relaciones imaginarias.»

El arte clásico se corresponde con el mundo griego, es escultural. «Significa la unión, la armonía entre el fondo y la forma, principalmente la forma humana, en la que se fusionan lo espiritual y lo animal.»

La modernidad, por último, es romántica: «Lo absoluto, la subjetividad más matizada, se expresa en el universo infinito de la intuición, en esa movilidad que le es propia y que, a cada momento, ataca y disuelve cualquier forma concreta.»

SHEILING



Sus trabajos esta influenciados por la Crítica del juicio es el punto de partida de la filosofía del arte.

En Sheiling encontramos que la autonomía de la estética obedece a que la belleza a un “concepto eterno”, es decir, un concepto transcendente, entendiendo por ello como un concepto intemporal, aleja de las contingencias y de los accidentes históricos.

Por tanto, la belleza tiene una connotación metafísica, por cuanto expresaría la esencia de vida, esto es sur rasgos universales y eternos.

La autonomía de la estética mencionada por Schelling se centra en que el hecho se basa en lo bello capta la esencia de la vida, ello implica que la belleza es sinónimo de la verdad.

Según Sheiling, lo bello es la representación de lo infinito en lo finito, y muestra en sensible encarnación la unidad de lo ideal y lo real, lo teórico y lo práctico, lo subjetivo y lo objetivo.

Para este autor el arte era la culminación de la filosofía y de toda ciencia, en la manifestación artística se hallaban juntos lo inconsciente y lo consciente, lo ideal y lo real, lo finito y lo infinito. El arte era así la expresión máxima del ser humano por quien, como prolongación de la inconsciente Naturaleza, se expresaba lo divino.
En Sheiling hay gradaciones y un más y un menos en la belleza, que, aunque tenga una vertiente subjetiva y el juicio no esté matemáticamente determinado, tampoco es radicalmente arbitra-rio y absurdo

4.  Lectura de documento

El juicio estético sobre lo bello lo sublime en el arte y en el pensamiento.
La estética o la filosofía de lo bello - aula
La influencia de Kant en la ética contemporánea

5.PALABRAS CLAVES :
BELLO: Lo bello es todo aquello que crea ilusión y proporciona placer, es todo lo que excita las emociones o lleva al deleite espiritual, es lo que me motiva o me impulsa a crear. O simplemente es aquello que sirve de regocijo y alegría. Lo bello es lo que le gusta cada persona.
SUBLIME: Lo sublime es una categoría estética, y que consiste fundamentalmente en una belleza extrema, capaz de llevar al espectador a un éxtasis más allá de su racionalidad, o incluso de provocar dolor por ser imposible de asimilar. El concepto de lo "sublime" fue redescubierto durante el Renacimiento, y gozó de gran popularidad durante el Barroco, durante el siglo XVIII alemán e inglés y sobre todo durante el primer Romanticismo.
ESTETICO: Relativo a la percepción y disfrute de la belleza, que tiene aspecto bello, artístico.
MORAL: La moral son las reglas o normas por las que se rige la conducta de un ser humano en concordancia con la sociedad y consigo mismo. Este término tiene un sentido contrario frente al de «inmoral» (contra la moral) y «amoral» (sin moral). La existencia de acciones y actividades susceptibles de valoración moral se fundamenta en el ser humano como sujeto de actos voluntarios. Por tanto, la moral se relaciona con el estudio de la libertad y abarca la acción del hombre en todas sus manifestaciones.
JUICIO: El juicio es una controversia jurídica y actual entre partes, y sometido al conocimiento de un tribunal de justicia. Esto presupone la existencia de una controversia o conflicto de interés, es decir, la sustentación de derechos e intereses contradictorios o contrapuestos a lo defendido por la parte contraria, y que la perjudican.
CUIDADO: Cuidado es la acción de cuidar (preservar, guardar, conservar, asistir). El cuidado implica ayudar a la otra persona, tratar de incrementar su bienestar y evitar que sufra algún perjuicio. También es posible cuidar objetos (como una casa) para impedir que ocurran daños.
DESEO: El deseo se dice del anhelo de saciar un gusto. La agradabilidad que conmueve nuestros sentidos, sea por encauzamiento, o motivado por vivencias pasadas, o por neto reflejo corporal, ya sea por objetos materiales, por saber, por personas o por afectos.

CRÍTICA: es aquella reacción u opinión personal sobre un determinado tema, generalmente, los seres humanos, a través de las críticas manifestamos no solamente nuestras opiniones personales sobre x tema, sino que además juzgamos, la belleza, fealdad, maldad o bonanza de una persona o cosa.







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